Rita Christen, la primera mujer presidenta de la Asociación Suiza de Guías de Montaña
Rita Christen es la primera mujer en ser electa presidenta de la Asociación Suiza de Guías de Montaña (ASGM) en los más de 100 años de historia de la organización. Esta mujer de 54 años que vive en Disentis es guía de montaña, abogada y muchas cosas más.
Cuando era pequeña, Rita Christen iba a la escuela pedaleando con las botas de esquí puestas y los esquíes atados a la bicicleta. “No tenía tiempo que perder y estaba desesperada por ponerme los esquíes”, recuerda. Durante la temporada de esquí, pasaba cada momento libre en la telesilla del pueblo de Urnäsch en el cantón de Appenzell Ausserrhoden. Su padre era el director del teleférico Säntisbahn y cuando ella tenía diez años a menudo esquiaban fuera de pista por las pendientes más salvajes del Säntis. “Ese fue mi primer encuentro con los deportes de montaña. Cómo me gustaban esos descensos…”, recuerda Christen. Cuando su padre estaba demasiado ocupado para esquiar, ella se unía al equipo de rescate de montaña en su última salida al final del día para asegurar que no quedara nadie lastimado en las pistas.
Nadie habría pronosticado que en 1998 obtendría la licencia de guía de montaña suiza – la duodécima mujer en lograr esta distinción – y que un día, en 2021, se convertiría en la primera mujer presidenta de la Asociación Suiza de Guías de Montaña ASGM. Christen siempre fue aficionada a los deportes, pero cuando era joven no le interesaba mucho unirse al club de esquí o concentrarse en una disciplina específica de atletismo. Sin embargo, cuando se unió al club deportivo local pronto llamó la atención por su desempeño en las carreras de velocidad y en salto en largo. La alentaron a convertirse en atleta competitiva, pero no lograron convencerla. “No me interesaba nada que fuera convencional”, comenta Christen.
Una idea alocada
A Christen le encantaba la escuela y era una excelente alumna. Era una de las pocas niñas de su pueblo que iba a la escuela secundaria en Appenzell. Sus intereses eran muy diversos: soñaba con ser profesora de deportes, física y hasta etnóloga. Cuando terminó la escuela secundaria, decidió estudiar Derecho. “Vivir en una sociedad que honrara la justicia y la igualdad de oportunidades para todos era muy importante para mí”, rememora Christen.
Pero la facultad de derecho no era suficiente para ella. En el primer año aprobó los exámenes del segundo año de la carrera y el segundo año lo pasó viajando. “Estaba tratando de encontrarme a mí misma y estaba decidida a darle la espalda a lo convencional”, comenta Christen. Su viaje la llevó a completar un doctorado en filosofía del derecho, para lo cual pasó un verano en América del Norte viviendo según las tradiciones de los cherokee.
La decisión de su esposo de instalar un estudio de ecología forestal y vivir en Disentis, una aldea alpina en Graübunden, no era exactamente lo que ella había imaginado para su vida. Sin embargo, abandonó sus planes de trabajar en el extranjero como especialista en asistencia para el desarrollo y se mudó con él a Graübunden. “¿Y ahora qué?” se preguntó. Su respuesta fue realizar un curso de guía de montaña. “Era una idea bastante alocada. Tenía muy poca experiencia en montañismo”. Christen pasó los dos años siguientes preparándose para embarcarse en una pasantía como guía de montaña suiza. “Estoy muy contenta de haber elegido este camino. Soy guía de montaña desde hace 20 años y aún disfruto cada caminata y cada ascenso”.
Presidenta
En noviembre de 2020, Christen fue electa presidenta de la ASGM, que cuenta con 1.492 guías de montaña entre sus miembros, de los cuales algo menos del 3% son mujeres (según cifras de 2021). Como dice la propia Christen, esto hace que sea aún más extraordinario el hecho de que una mujer se encuentre al timón de la asociación. “Dice mucho sobre la apertura mental de la ASGM”, comenta Christen con un guiño. Está bien preparada para el puesto, sobre todo porque antes de ser electa presidenta se había desempeñado durante un año en el comité ejecutivo de la ASGM. “Me gusta hacer campañas por buenas condiciones de trabajo para mis colegas y ayudar a mejorar los cursos de capacitación de la ASGM”.
Christen tiene la seguridad de que la asociación que encabeza está en muy buena forma. Su predecesor, Marco Mehli, el equipo administrativo y el equipo de capacitación hicieron un buen trabajo, dice Christen. También observa, sin embargo, que es cada vez más difícil encontrar gente joven dispuesta a convertirse en guías de montaña. “Nuestra profesión corre el riesgo de ir desapareciendo”, comenta Christen. Por eso la ASGM está promocionando a los jóvenes talentos para que los cursos y la profesión misma sean más atractivos para los jóvenes. Christen no planea ninguna medida dirigida específicamente a las mujeres. “Hace mucho que se alienta a las mujeres a tomar los cursos para convertirse en guías de montaña suizas. Y afortunadamente las mujeres jóvenes de hoy crecen sintiéndose libres de elegir su propio camino”.
Diferentes roles profesionales
Christen es un ejemplo de que el éxito profesional puede adoptar muchas formas. Durante varios años hizo malabares entre diferentes carreras como guía de montaña, rescatista de montaña y también como empleada a tiempo parcial en el tribunal administrativo cantonal en Chur. Además crió a dos hijos y es instructora certificada de yoga. "Ocupo diferentes roles profesionales. He creado un mosaico profesional que a mí me funciona bien”, dice.
También encontró maneras creativas de combinar su experiencia profesional para asumir nuevos desafíos. Enseña derecho alpino, preside el grupo de expertos responsable de evaluar los accidentes de montaña para los tribunales suizos y para empresas de seguros, y fue miembro de la junta de la Federación Internacional de Montañismo y Escalada. Como presidenta de la ASGM, ahora puede hacer uso de toda esta experiencia.
“Es un desafío que me entusiasma mucho”, expresa Christen. Además es un puesto a tiempo parcial, lo que le deja tiempo para otros retos. “Me imagino incursionando en un campo completamente diferente. ¿Por qué no filosofía?”.
Texto: Anita Bachmann, Asociación Suiza de Guías de Montaña