El grifo suizo que preserva el agua y salva vidas
Durante la actual pandemia de COVID-19 se ha puesto el foco en la práctica de una buena higiene de manos. En medio de la explosión en la demanda de alcohol en gel y mascarillas, no debemos olvidar que hay unas 3 mil millones de personas que no pueden lavarse las manos con agua y jabón en sus casas. Todos los años mueren 1.700.000 niños por enfermedades transmitidas por la falta de higiene. En Suiza se están desarrollando interesantes innovaciones para satisfacer estas necesidades, como The Drop, que recientemente fue reconocida en la lista de mayo de 2020 de UNICEF de estaciones de lavado de manos e insumos para la respuesta al COVID-19.
The Drop (La Gota) es un grifo eco-sanitario, cuyos principales beneficios son sus propiedades higiénicas y de ahorro de agua. Su sistema de pulsación limita el contacto y así acumula 40% menos microbios que un grifo tradicional. Además distribuye el agua en forma pareja a 360 grados y es autolimpiante, todo lo cual ahorra agua en el proceso. El resultado es que usa 70% menos agua que un grifo convencional, y así preserva recursos valiosos y reduce los costos para las comunidades con medios escasos y presupuestos limitados.
Suiza goza de una merecida reputación por estar a la vanguardia de los nuevos desarrollos farmacológicos y tecnológicos. El gel hidroalcohólico fue formulado por William Griffiths en 1976 en el Hospital Cantonal de Friburgo y refinado por el Profesor Pittet en 1995 en los Hospitales Universitarios de Ginebra. Esta colaboración, conocida ahora como ‘el modelo de higiene de manos de Ginebra’ fue democratizado por Pittet, quien entregó la fórmula y la patente a la Organización Mundial de la Salud. Además, el grifo Smixin, que usa 90% menos agua que los grifos convencionales, fue inventado en Biel en 2009.
Éxito en los cinco continentes
The Drop fue diseñado por Patrick Houriet y es producido en colaboración con el Centro de Microtecnología en Saint-Imier para reducir los costos a la vez que brinda una valiosa experiencia a los futuros ingenieros. Cada dispositivo viene con dos años de garantía y puede instalarse con facilidad en pequeñas redes de distribución de agua, grifos, bidones, botellas y otros recipientes.
The Drop es un producto de la Asociación de Desarrollo Sostenible (ADED), una organización sin fines de lucro integrada por voluntarios con sede en Ginebra y establecida en 2011.
Su objetivo primario es brindar asistencia técnica y financiera a proyectos de desarrollo sostenible, tal como explica el vocero de ADED:
Estamos buscando inversores, distribuidores y empresas que puedan ayudar a The Drop a convertirse en un producto efectivo que contribuya a salvar vidas además de preservar el agua y el medio ambiente..
ADED ha emprendido proyectos exitosos en Brasil, Camerún, Ecuador, la República de Karakalpakistán y Senegal. Su vocero resalta el éxito del producto hasta el momento:
Hemos recibido comentarios extremadamente alentadores y positivos de los beneficiarios de los más de 10.000 grifos que hemos instalado en los cinco continentes. Se los puede encontrar en todas partes: en hogares, escuelas, hospitales, restaurantes, talleres, iglesias, mezquitas, campamentos y tiendas. Todos aprecian el aspecto divertido del grifo The Drop, además de cómo economiza agua y, por supuesto, su contribución a la higiene. Los niños lo adoptan muy rápido, si bien hay que dar instrucciones claras para que se lo use de forma eficiente.
Responder a las necesidades del mundo
Actualmente ADED está desarrollando una estación de lavado de manos que incorpora esta tecnología y podría tener un enorme impacto positivo en el mundo entero, como explica el vocero:
Tres mil millones de personas (40% de la población mundial) no tienen la posibilidad de lavarse las manos con agua y jabón en sus hogares. Así que el potencial de desarrollo es enorme. Estamos creando una cartera de soluciones que incluyen una estación de lavado de manos conectada y totalmente autónoma ya que puede reciclar el agua usada y funcionar en un circuito cerrado.
Estos desarrollos son aún más importantes cuando se considera la creciente presión sobre el suministro de agua dulce del mundo.
La contaminación y el cambio climático han contribuido a la desaparición de más de la mitad de los humedales del mundo y los patrones climáticos cada vez más erráticos continúan provocando sequías y escasez de agua en muchas regiones. Se estima que dos tercios de la población mundial podrían padecer escasez de agua para el año 2025.
En Senegal se está finalizando un estudio bacteriológico y epidemiológico para validar las propiedades de esta nueva estación de lavado de manos y ADED está en contacto con numerosas ONG y organismos internacionales para maximizar el impacto de sus productos en todo el mundo.