El valle suizo a punto de volverse 100% orgánico
Val Poschiavo, en el cantón de los Grisones, es pionero mundial de la agricultura orgánica. Allí la gente cultiva la tierra de esta manera desde hace unos 30 años y apuntan a ser 100% orgánicos en los próximos dos años.
Todo comenzó en los años 2000, cuando Val Poschiavo, un pequeño valle en los Grisones con unos 5.000 habitantes y enclavado en la zona de habla italiana entre la Engadina y Lombardía, comenzó a cuestionar su modelo de negocios. "A fin de dar nuevo impulso a la región y valorizar nuestro paisaje y la producción local, tomamos medidas para que nuestro valle fuera incluido en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO junto con el Ferrocarril Rético," explica Cassiano Luminati, coordinador del proyecto para la candidatura ante la UNESCO y actual director del Polo Poschiavo, un centro de formación continua y apoyo a proyectos de desarrollo territorial. En este valle alpino encontramos uno de los ejemplos más emblemáticos de la infraestructura suiza: el increíble viaducto circular de Brusio, con el tren turístico rojo del Bernina Express. "Estamos orgullosos de haber merecido este valioso reconocimiento internacional en 2008. Gracias a los pasos que dimos, toda la tierra de cultivo que se ve desde el tren forma parte del territorio reconocido. Esto ha permitido que los diversos sectores de nuestra economía local participen en el diseño de una estrategia de desarrollo común". La idea de que todo el valle sea orgánico surgió inicialmente de la noción de reunir a todos los sectores locales. El concepto gradualmente fue ganando terreno y se puso en práctica en 2012 en la Conferencia Alpina – el órgano decisorio de la Convención Alpina – que se realizó en Val Poschiavo. Desde 2015, Val Poschiavo se ha atribuido el sello de Smart Organic Valley. "Todo comenzó con un libro sobre el concepto de territorios inteligentes (smart land) en base a criterios divididos en cinco áreas diferenciadas: paisaje, competencias, recursos, movilidad y gobernanza. El enfoque del libro coincidía con nuestros propios valores y objetivos, así que decidimos adaptar este concepto urbano a la escala de nuestro valle", recuerda Luminati.
Smart Organic Valley
Esta denominación en inglés fue tema de extensas discusiones y recibió el amplio apoyo de los habitantes del valle. Val Poschiavo es un modelo exitoso tanto desde el punto de vista conceptual como humano. Sobre todo, su concepto es único en el mundo: en la actualidad, es la única región que ha logrado convertir a casi todos sus productores a la agricultura orgánica. "Algunos ya nos habíamos capacitado en agricultura orgánica en los años 90. Así que esta forma de vivir y de trabajar es parte de nuestra vida cotidiana desde hace tiempo. Nuestra meta es ser 100% orgánicos en los próximos dos años", comenta Luminati. "Pero no se trata solo del territorio, sino que queremos ir un paso más allá, porque la certificación orgánica en Suiza sólo existe para productos".
"Para que nuestro proyecto se convirtiera en realidad, necesitábamos el apoyo de todos los sectores de la economía. Y como muchos de nuestros ciudadanos se sintieron identificados con el proyecto, finalmente fue posible involucrar a todos", dice Luminati. Actualmente, más del 90% de los productores agrícolas se han vuelto orgánicos y 60 productores locales están participando en el proyecto orgánico más radical. Esta parte de los Grisones de habla italiana alberga a todo tipo de productores, desde productores de cereales, frutas y hortalizas, hierbas aromáticas a carniceros y fabricantes de queso. "El objetivo común nos ha permitido formar una red, coordinarnos y desarrollar formas de asistencia recíproca en nuestro proceso de cambio", comenta con orgullo el ex presidente de la asociación regional de Val Poschiavo. Esta nueva armonía ha tenido un impacto directo en el medio ambiente y en la calidad de vida en el valle. "El impacto ha sido más notorio en el medio ambiente y en la biodiversidad local. Nuestra tierra volvió a ser productiva y ahora se vuelven a cultivar variedades que habían desaparecido del valle, como la cebada y el trigo sarraceno. El retorno de las especies locales nos ha permitido redescubrir los paisajes agrícolas del pasado", dice Luminati entusiasmado. La nueva sinergia se ve confirmada por la mezcla intergeneracional: los alrededor de 50 establecimientos agrícolas del valle son administrados tanto por manos experimentadas como por jóvenes recién graduados, tanto familias locales como recién llegados. "Vengo de una familia que siempre practicó la agricultura orgánica, así que era totalmente lógico para mí adoptar esta forma de trabajar", dice Annina Raselli, una joven agricultora orgánica de Poschiavo. "La decisión de abstenerse de usar sustancias químicas implica más trabajo, pero no estoy dañando la naturaleza y puedo ofrecer frutas y hortalizas 100% naturales a mis clientes. La Madre Naturaleza no nos necesita, pero nosotros dependemos de ella. El proyecto Smart Organic Valley promueve el consumo local y responsable y estoy orgullosa de formar parte de eso".
Salvaguardar el patrimonio local
Si todos se sumaron al proyecto fue en parte porque permite salvaguardar el patrimonio común del valle. "Tuvimos que generar conciencia antes de que todos comenzaran a introducir cambios. Presentamos el proyecto a las autoridades y creamos varias herramientas incluido un centro de capacitación. El resto del proceso se llevó adelante en forma individual. Así nos aseguramos de que todos lo hicieran por ellos mismos y por sus propios negocios antes que nada", comenta Luminati, que también fue consejero local en Poschiavo entre 2002 y 2015. Esta nueva tendencia positiva ha permitido salvaguardar las competencias locales que estaban en peligro de desaparecer, como la construcción de muros de piedra seca.
Además de adoptar la producción orgánica, los establecimientos agrícolas del valle también optaron por la energía renovable: la mayoría instalaron paneles solares en los techos. "También innovamos en el transporte. Nuestro valle solo es accesible en automóvil o en tren, y nos convertimos en la primera región en los Grisones en probar y adoptar el autobús postal eléctrico como medio de transporte público", dice Luminati. La dinámica positiva en esta comunidad de los Grisones también tuvo un impacto en la vida política. "Hemos notado que nuestros ciudadanos se están involucrando más que antes y que los debates se han vuelto más abiertos. La inclusión de todos los habitantes de Val Poschiavo en todas las decisiones locales tomadas por las autoridades ha llevado a una mayor participación. Cada uno de nosotros se da cuenta de lo privilegiados que somos de vivir en este valle. Estamos orgullosos de que el resto del mundo nos considere un modelo a seguir. Este reconocimiento nos alienta a perseverar en esta dirección y pensar en más mejoras para el futuro. Ahora estamos trabajando en una visión 2040 para certificar el concepto de Smart Organic Valley". El proyecto, beneficioso para el planeta y para el espíritu, ha traído armonía duradera a todo el valle.